Grecia /// Una sociedad cerrada, una isla en la que todo parece fluir en silencio, solo interrumpido por la muerte súbita y extraña del jefe del lugar, Temístocles, dejando tras de sí una enorme fortuna. Sin herederos, todos se preguntan cuánto dinero habrá dejado. La propiedad se divide entre los cuatro "poderes" del pueblo: el presidente de la comunidad, el jefe de policía, el maestro de la escuela y el sacerdote. Para heredar todo el dinero deben leer públicamente en la plaza una carta, cuyo contenido solo conocía Temístocles. ¿Aceptarán leerla?