Vox Machina encuentra a la líder sagrada de Piedrablanca, la Guardiana Yennen, que les habla de una rebelión en ciernes. El equipo se da cuenta de que para derrotar a los Frondespino necesitarán la ayuda del líder rebelde, Archibald Desnay. Pero antes deben organizar una audaz fuga de prisión y enfrentarse al sádico carcelero de los Frondespino, Kerroña Piedravil.