Un relato escalofriante de lo que sucedió cuando una noche de celebración de Halloween se convirtió en una pesadilla. Más de 100.000 jóvenes juerguistas, que estaban apiñados en las estrechas callejuelas bordeadas de bares del moderno barrio de Itaewon en Seúl, quedaron atrapados en un pánico masivo. El número de víctimas fue asombroso: 159 personas, entre ellas dos estudiantes estadounidenses que estudiaban en el extranjero, se asfixiaron y murieron esa noche. Casi todos los que murieron tenían veintitantos años.